8 cosas que quizá no sabías de BLACK SABBATH

BLACK SABBATH es de las pocas bandas que pueden albergar distintas generaciones y a su vez estilos; sin embargo, son de las bandas que también han pasado por diversas etapas en su alineación y han sufrido inestabilidad como grupo.

¿Cosas que quizá no sabías? Tal vez, pues como banda favorita es de pocos, e interesarse en rarezas de la banda es de menos aun (ya que la mayoría sólo busca datos curiosos de Ozzy Osbourne), por eso mismo, te dejamos una lista de 8 cosas que tal vez no conocías de la historia de esta banda británica que muy pronto estará visitando Latinoamérica.

1.-La misteriosa portada del primer álbum de la banda. James Hetfield de Metallica dijo alguna vez que mirar la portada del primer disco del grupo titulado “Black Sabbath” le produjo pesadillas y terror. Al ver la misteriosa foto de la carátula del álbum uno no puede dejar de concentrarse en la figura desdibujada de la mujer vestida de negro que sostiene un gato del mismo color entre manos. La chica en mención no es una bruja ni tampoco apareció misteriosamente en la foto. Según Pete Sarfas, un reputado periodista inglés, la modelo se llamaba Louise y según algunas leyendas murió trágicamente en un accidente de auto en 1970. Hay reportes documentados de adolescentes que no pudieron dormir por ver la portada del disco. 

2.- El oscuro nombre del grupo. Black Sabbath tiene uno de los nombres más fácilmente reconocibles de la historia del rock. Su origen se remonta a una película del director italiano Mario Bava llamada “Las tres caras del miedo”, filme que fue traducido al inglés sencillamente como “Black Sabbath”. Sin embargo, otra vertiente relacionada con el significado del nombre apunta a que la traducción al español sería “Sábado negro”, aunque lo más apropiado sería Sabbat Negro. El Sabbat o séptimo es en la semana judía el día de descanso y celebración según prescribe el Antiguo Testamento. Por otro lado, Sabbat también es una palabra asociada a la celebración del aquelarre o reunión de brujas con el demonio en figura de macho cabrío, por lo que la traducción correcta del nombre sería “Aquelarre Negro”, dejando en evidencia la fascinación de la banda por el ocultismo.

3.- Los dedos de Iommi. En su juventud, el guitarrista del grupo Tony Iommi trabajaba en una fábrica metalúrgica donde hacía moldes pequeños de metal. Un día tuvo que reemplazar al operador de la máquina perforadora, y debido a su poca pericia, sufrió un accidente que le cortó la punta de los dedos. De inmediato, Iommy cogió los pedazos de piel y los llevo al hospital donde le dijeron que no podían hacer nada. Desde entonces, el guitarrista usa una prótesis para poder tocar la guitarra, aunque al principio fundía una botella de plástico sobre sus dedos y luego los limaba para darles forma y poder tocar.

4.-El día en que Tony Iommi incendió a Bill Ward. Aunque cueste creerlo, un día aciago Tony prendió fuego a su baterista, Bill Ward, con una botella de gasolina. Durante la grabación del disco “Heaven & Hell”, Tony le preguntó a Bill: “¿Puedo prenderte fuego?, y él dijo: “Si”, entonces el músico procedió a hacerlo. “Cogí una botella de gasolina, la incliné sobre Bill, y le prendí fuego. ¡No podría creerlo! Se encendió como un árbol de Navidad”, dijo Iommi en una entrevista con la revista Guitar World. “Él gritó y empezó a rodar por el suelo. Su ropa ardía y sus calcetines de nylon se pegaron a su piel. Yo no pude ayudarlo porque no podía parar de reírme”, agregó el músico. Los años de drogas y excesos estaban en su momento más crudo. Bill Ward sufrió quemaduras de tercer grado en brazos y piernas y Tony no volvió a bromearse así con su compañero de banda.

5.- El fantasma del castillo donde grababan. Los miembros de la banda cuentan una historia que juran es cierta. Sucedió cuando grababan algunos temas del álbum "Sabbath Bloody Sabbath" en un viejo castillo inglés. Ozzy Osbourne, el vocalista, descansaba en una de las habitaciones junto a la chimenea cuando de repente una brasa de fuego salió de ésta y el cuarto entero empezó a arder. El cantante fugó espantado del lugar. Cuentan algunas versiones que los músicos vieron a una persona desconocida caminando por el castillo. Muy asustados, los artistas siguieron al extraño sujeto hasta una habitación pero ésta estaba vacía y cerrada desde el interior. Los músicos abandonaron el castillo esa misma noche.

6.- La banda fue visitada por una secta satánica en su hotel. Tony Iommi contó alguna vez que la banda recibió la visita de un grupo extraño de fans. “Una noche, después de una actuación, volvimos al hotel y nos encontramos en el pasillo a muchas personas vestidas con capas negras y sentadas en el suelo con velas en sus manos que cantaban extraños himnos. Tuvimos que pasar por encima de ellos para llegar a nuestras habitaciones, pero todavía podía oírles cantar. Llamamos a seguridad pero no nos hicieron caso. Entonces sincronizamos nuestros relojes para abrir todas nuestras puertas a la vez. Ozzy apagó las velas orinando sobre ellos y les cantó ‘Feliz Cumpleaños’. ¡Se pusieron a bailar como locos! Esperaban que les ayudáramos a dirigir su secta satánica y a cambio recibieron una fiesta de cumpleaños”.

7.- Las veces que Ozzy dejó a Black Sabbath. El siempre movedizo Ozzy dejó por primera vez a la banda en septiembre de 1977. Aquella vez, debido a su adicción al alcohol y las drogas, y además porque su padre había fallecido, el músico entró en una severa depresión. La segunda vez que dejó el grupo fue en mayo de 1979, aquí es donde se marcó el fin definitivo de la primera etapa de Sabbath. Las razones de este segundo abandono no son muy claras. Algunos rumores dicen que la banda  hizo su gira de “Never Say Die” como un tour de despedida, pero la razón que más sentido cobra es que Iommi estaba cansado de los excesos de Osbourne y decidió despedirlo para seguir con otro vocalista, el recordado Ronnie James Dio.

8.- Los temores de Ozzy Osbourne y su vida al borde de la muerte. Una de los temores que tenía Ozzy Osbourne era morir a causa del excremento de algún pájaro. El intérprete de “Iron Man” dijo alguna vez: “¿Sabes cómo voy a morir? Un pájaro con un virus raro volará sobre mi cabeza. Me echará una cagada y entonces me desplomaré en el suelo”. Tan extraño temor le quedó instalado luego que arrancó la cabeza de una paloma con la boca y hacer lo mismo con un murciélago que pensó que era de goma. La estrella británica tuvo que ser trasladado a un hospital y ser inyectado con muchas vacunas antirrábicas. “Ha sido la más horrible y dolorosa experiencia de toda mi vida”, dijo. Hoy, Osbourne lleva una vida tranquila y dice que vive de las rentas de Sabbath. “Si no hubiera sido por Black Sabbath llevaría muerto hace mucho tiempo. Actualmente solo bebo agua. No bebo nada más, no consumo drogas, no fumo, soy bastante aburrido”.